Destino y hadas
Moderadores: Panoramix, biomana
Destino y hadas
La palabra hada significa destino.
Sentarse a esperar a ver que trae la marea no es lo mismo que montarse en una lancha y salir a ver que pesaca uno, lo que no es igual a salir con un mapa en la mano y un detector de metales a encontar oro ahogado en el mar.
Una persona que mira todo el día el techo, esperando a ver que le trae la vida, no está excenta de recibir un buen día una fortuna formidable.
Alguien que busca el oro toda su vida y va y viene y sigue un plan estrategico, podría nunca llegar a conseguir lo propuesto.
¿Es el destino algo que ya está escrito o es algo que uno crea?
¿Hemos nacido con un hada o el hada hemos de serlo nosotros mismos?
Yo, en lo personal, creo que somos el hada de nuestras vidas.
Sentarse a esperar a ver que trae la marea no es lo mismo que montarse en una lancha y salir a ver que pesaca uno, lo que no es igual a salir con un mapa en la mano y un detector de metales a encontar oro ahogado en el mar.
Una persona que mira todo el día el techo, esperando a ver que le trae la vida, no está excenta de recibir un buen día una fortuna formidable.
Alguien que busca el oro toda su vida y va y viene y sigue un plan estrategico, podría nunca llegar a conseguir lo propuesto.
¿Es el destino algo que ya está escrito o es algo que uno crea?
¿Hemos nacido con un hada o el hada hemos de serlo nosotros mismos?
Yo, en lo personal, creo que somos el hada de nuestras vidas.
- Äriastóteles
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RE: Destino y hadas
Te conocí como un rayo del más esplendoroso de los soles. Te amé como la realización más bella de este universo. ¿Fue hado impersonal? No lo sé. ¿Fue destino construido? Tampoco lo sé. ¿Es hada el alma? Tampoco lo sé. A veces, tan sólo quisiera que una gota de tu persona se derramara en mi vida; no para regresar, sino para saber que todavía estás ahí. Si volvieras, sería agridulce. Si no vuelves, es agridulce. ¿A qué juega el día de hoy?
Quizá deba señalar que se llama también hado al destino, así, en masculino. La pregunta de Laurye estimula a pensar, a imaginar. ¿Existe el libre albedrío? ¿Está predeterminado nuestro destino? Yo, en lo personal, espero que sea lo mejor que sea.
En algunas mitologías, el hada es quien nos conduce a un destino catastrófico. En El ocaso de los dioses, de Wagner, las tres Nornas tejen el hilo del destino, y comentan acontecimientso que sucederán sin que nadie pueda cambiarlos. Ellas son quienes lo tejen, ¿son responsables de los que sucede en la escena? Aquí un fragmento de lo que canta una de ellas:
Para bien o para mal,
yo enrollo la cuerda y canto.
Bajo el Fresno del Mundo
tejía antes, cuando a éste
aún le crecían hojas
grandes y fuertes de su tronco,
cuando aún era un bosque de nobles ramas.
Quizá deba señalar que se llama también hado al destino, así, en masculino. La pregunta de Laurye estimula a pensar, a imaginar. ¿Existe el libre albedrío? ¿Está predeterminado nuestro destino? Yo, en lo personal, espero que sea lo mejor que sea.
En algunas mitologías, el hada es quien nos conduce a un destino catastrófico. En El ocaso de los dioses, de Wagner, las tres Nornas tejen el hilo del destino, y comentan acontecimientso que sucederán sin que nadie pueda cambiarlos. Ellas son quienes lo tejen, ¿son responsables de los que sucede en la escena? Aquí un fragmento de lo que canta una de ellas:
Para bien o para mal,
yo enrollo la cuerda y canto.
Bajo el Fresno del Mundo
tejía antes, cuando a éste
aún le crecían hojas
grandes y fuertes de su tronco,
cuando aún era un bosque de nobles ramas.
- Äriastóteles
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Re: RE: Destino y hadas
¡Genial, Marlenn, bravo! :DMarlenn escribió:Me encanta la ópera Ariästóteles.
RE: Destino y hadas
Ariastóteles dice:
¿Es hada el alma?.... Quizá deba señalar que se llama también hado al destino, así, en masculino.
Creo que el alma, que esta en el corazón, es el hado ( destino masculino), es decir, el hado es el sueño, lo que anhelamos tener, vivir o ser.
El hada (destino femenino), vendría siendo la mente, el conocimiento del que disponemos para hacer realidad el sueño.
Así que cuando hada y hado se casan (o la mente y el corazón trabajan integrados), entonces viene la gran fecundación, la magia: el corazón se hace realidad en la vida, y puede nacer el sueño, lo que más anhelamos.
Uno no puede ser hada sino de su propio corazón.
¿Es hada el alma?.... Quizá deba señalar que se llama también hado al destino, así, en masculino.
Creo que el alma, que esta en el corazón, es el hado ( destino masculino), es decir, el hado es el sueño, lo que anhelamos tener, vivir o ser.
El hada (destino femenino), vendría siendo la mente, el conocimiento del que disponemos para hacer realidad el sueño.
Así que cuando hada y hado se casan (o la mente y el corazón trabajan integrados), entonces viene la gran fecundación, la magia: el corazón se hace realidad en la vida, y puede nacer el sueño, lo que más anhelamos.
Uno no puede ser hada sino de su propio corazón.
RE: Destino y hadas
Hola, Marlenn!
Tu dices:
Pues en principio sí creo que podemos ser dueños de nuestro destino.
Pero que no todos tenemos las mismas oportunidades para serlo.
... podemos ser dueños de nuesttro destino yo lo entiendo como que todos podemos ser dueños de lo que anhela nuestro corazón.
... pero no todos tenemos las mismas oportunidades para serlo. esto yo lo entiendo como que no todos tenemos la mente o el conocimiento para seguir al corazón.
Tu dices:
Pues en principio sí creo que podemos ser dueños de nuestro destino.
Pero que no todos tenemos las mismas oportunidades para serlo.
... podemos ser dueños de nuesttro destino yo lo entiendo como que todos podemos ser dueños de lo que anhela nuestro corazón.
... pero no todos tenemos las mismas oportunidades para serlo. esto yo lo entiendo como que no todos tenemos la mente o el conocimiento para seguir al corazón.
- Äriastóteles
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RE: Destino y hadas
A veces me doy cuenta de que la vida es emocionante en su sinsentido. A veces, incluso parece que tiene sentido, que hay destino, pero la verdad, no sé si haya destino. Tampoco sé si esto del hada sea algo bueno, pues en general a mí me parece que el mundo está bajo el imperio del mal. Hay quienes no creen que existan ni el bien ni el mal. ¡Felicidades!, pero yo no puedo fingir que no hay mal, porque no es un concepto que pienso, sino una sensación que padezco.
RE: Destino y hadas
Apreciable Ariastóteles,
Parece como si tu ánimo dependiese de algo que se "mueve en tus profundidades" ajeno a ti pero jalándote constantemente hacía donde quiere, su fuerza por lo general paseándote por el nivel depresivo.
Pienso que entre tus líneas delatas más que un sueño perdido, hay muchos, un cúmulo de ellos en tus profundidades, los cuales se han vuelto corrientes subterráneas de tu vida.
Dices cosas como: Te conocí como un rayo del más esplendoroso de los soles...
En este párrafo (por cierto, bellamente redactado) hablas de un destino que fué, y luego se fue. Yo dudo que un destino que llega pueda irse o "no cumplirse por culpa de los dioses", creo que en el momento de que te encuentras con algo, el destino se cumple, lo que sigue es ver que tanto puedes moverte con ese destino, pues estos no son algo fijo, se mueven y transforman y tu habrás de hacerlo también o renunciar a él. El problema, creo está, es la insistencia de querer encajar lo ilimitado (al amor) en algo limitado (una sola forma de entender o vivir las cosas)
En fin, que me gustaría hacerte una pregunta: ¿Qué crees que es primero, lo que sientes o lo que piensas?
Parece como si tu ánimo dependiese de algo que se "mueve en tus profundidades" ajeno a ti pero jalándote constantemente hacía donde quiere, su fuerza por lo general paseándote por el nivel depresivo.
Pienso que entre tus líneas delatas más que un sueño perdido, hay muchos, un cúmulo de ellos en tus profundidades, los cuales se han vuelto corrientes subterráneas de tu vida.
Dices cosas como: Te conocí como un rayo del más esplendoroso de los soles...
En este párrafo (por cierto, bellamente redactado) hablas de un destino que fué, y luego se fue. Yo dudo que un destino que llega pueda irse o "no cumplirse por culpa de los dioses", creo que en el momento de que te encuentras con algo, el destino se cumple, lo que sigue es ver que tanto puedes moverte con ese destino, pues estos no son algo fijo, se mueven y transforman y tu habrás de hacerlo también o renunciar a él. El problema, creo está, es la insistencia de querer encajar lo ilimitado (al amor) en algo limitado (una sola forma de entender o vivir las cosas)
En fin, que me gustaría hacerte una pregunta: ¿Qué crees que es primero, lo que sientes o lo que piensas?
- Äriastóteles
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Re: RE: Destino y hadas
Respondo: Lo primero es lo que siento.Laurye escribió:Apreciable Ariastóteles [...] En fin, que me gustaría hacerte una pregunta: ¿Qué crees que es primero, lo que sientes o lo que piensas?
Respondo: a contrapelo de lo que dije arriba, a pesar de que es primero lo que siento, me parece que en este punto, lo que pienso es más importante que lo que siento, porque la razón desde el primer día de la ausencia del Sol me dijo: "Se ha ido, renuncia". Y desde un punto de vista intelectual, he renunciado por completo al Sol: yo nunca invito al Sol a salir, pero extraño sus rayos y su calor.Laurye escribió:...lo que sigue es ver qué tanto puedes moverte con ese destino, pues estos no son algo fijo, se mueven y transforman y tú habrás de hacerlo también o renunciar a él. El problema, creo está, es la insistencia en querer encajar lo ilimitado (el amor) en algo limitado (una sola forma de entender o vivir las cosas).
- Äriastóteles
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RE: Destino y hadas
:) ¡Ahora soy amigo del Sol! :)
Hay un aspecto de hada que me gustaría comentar aquí. Mi madre no nos contó a mi hermano y a mí cuentos de hadas, los escribió y los leyó para nosotros. Fue así que en mi primera infancia, el hada era un personaje feliz de un planeta feliz con una vida feliz.
Hoy, en cierta forma veo el hada como el personaje femenino que acompaña mi viaje, y por eso la veo como mi alma. El hada juega con nosotros, nos muestra la evanescencia de su danza, y sí, también, de vez en cuando nos regala un beso. ¿Qué hay más vaporoso que lo concreto? ¿No se desmorona hasta el mármol más empecinado?
Aparte: algunas de las palabras de Laurye son para paladearse despacito, como si fueran una comida que hay que masticar como si estuviésemos rumiando. Poco a poco la bella palabra se absorbe, y nos alimenta y nos nutre:
Hay un aspecto de hada que me gustaría comentar aquí. Mi madre no nos contó a mi hermano y a mí cuentos de hadas, los escribió y los leyó para nosotros. Fue así que en mi primera infancia, el hada era un personaje feliz de un planeta feliz con una vida feliz.
Hoy, en cierta forma veo el hada como el personaje femenino que acompaña mi viaje, y por eso la veo como mi alma. El hada juega con nosotros, nos muestra la evanescencia de su danza, y sí, también, de vez en cuando nos regala un beso. ¿Qué hay más vaporoso que lo concreto? ¿No se desmorona hasta el mármol más empecinado?
Aparte: algunas de las palabras de Laurye son para paladearse despacito, como si fueran una comida que hay que masticar como si estuviésemos rumiando. Poco a poco la bella palabra se absorbe, y nos alimenta y nos nutre:
Laurye escribió: ¿Hemos nacido con un hada o el hada hemos de serlo nosotros mismos?
Yo, en lo personal, creo que somos el hada de nuestras vidas.
RE: Destino y hadas
Ariastóteles si que esta inspirado hoy!!
Él escribe:
¡Ahora soy amigo del Sol!
Con una frase asi es donde yo diria que un hombre empieza a ser el hada de su vida... Si uno no es el hada, entonces la vida se pone muy helada, y no hay sol...
Y dice también:
Hoy, en cierta forma veo el hada como el personaje femenino que acompaña mi viaje, y por eso la veo como mi alma. El hada juega con nosotros, nos muestra la evanescencia de su danza, y sí, también, de vez en cuando nos regala un beso. ¿Qué hay más vaporoso que lo concreto? ¿No se desmorona hasta el mármol más empecinado?
Esto, a mi parecer, sólo puede ser producto de un alma "tocada" por la magia de un hada, es decir, cuando el ser humano se deja tocar por las curiosidades de su corazón.
Asi que me uno al festejo de alegria que muestra Ariastóteles este día, yme llevo yo también sus letras para paladearlas lentamente...
Él escribe:
¡Ahora soy amigo del Sol!
Con una frase asi es donde yo diria que un hombre empieza a ser el hada de su vida... Si uno no es el hada, entonces la vida se pone muy helada, y no hay sol...
Y dice también:
Hoy, en cierta forma veo el hada como el personaje femenino que acompaña mi viaje, y por eso la veo como mi alma. El hada juega con nosotros, nos muestra la evanescencia de su danza, y sí, también, de vez en cuando nos regala un beso. ¿Qué hay más vaporoso que lo concreto? ¿No se desmorona hasta el mármol más empecinado?
Esto, a mi parecer, sólo puede ser producto de un alma "tocada" por la magia de un hada, es decir, cuando el ser humano se deja tocar por las curiosidades de su corazón.
Asi que me uno al festejo de alegria que muestra Ariastóteles este día, yme llevo yo también sus letras para paladearlas lentamente...
- Äriastóteles
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RE: Destino y hadas
Hola, Marlenn. Nada en particaular. Sólo estoy a la espectativa. Si bien ayer fui visitado por un buen amigo...
- Äriastóteles
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RE: Destino y hadas
Marlenn: ¡Veo una luz al final del túnel! (¿Has leído sobre experiencias cercanas a la muerte? Jejejej).
Hace muchos años leí un libro que se llamaba El secreto más grande del mundo, cuyo autor era Og Mandino. En él aparecían una serie de pergaminos que uno debía recitar tres veces al día para que los mensajes fuesen asimilados por el subconciente. No fui fiel al programa, pero a veces, los mensajes aparecen en mi mente. Uno de los pergaminos decía así:
"Viviré este día como si fuera el último de mi existencia.
Y si es mi último día, será mi monumento más grande. Este día haré el mejor de mi vida. Este día aprovecharé los minutos hasta su máximo. Los saborearé y daré gracias. Aprovecharé todas las horas y a los minutos canjearé solamente por algo de valor".
Este pensamiento fue asimilado a otro, que procede de la tradición cristiana, cuando Jesús dice: "No os preocupeis por el día de mañana, cada dia trae su afán".
Tengo también esta otra idea, la cual es mía, hasta donde puede ser mía una idea: me doy cuenta de que yo no sé cómo se las arregla la Tierra para girar alrededor del Sol, y cómo se las arregla el mundo para organizarse cada día. Si me abandono a la corriente, la corriente me lleva.
Sin embargo, no todo el tiempo soy un pensador tan optimista, quizá mi carácter sea más bien contradictorio, con tendencia a lo sombrío.
Hace muchos años leí un libro que se llamaba El secreto más grande del mundo, cuyo autor era Og Mandino. En él aparecían una serie de pergaminos que uno debía recitar tres veces al día para que los mensajes fuesen asimilados por el subconciente. No fui fiel al programa, pero a veces, los mensajes aparecen en mi mente. Uno de los pergaminos decía así:
"Viviré este día como si fuera el último de mi existencia.
Y si es mi último día, será mi monumento más grande. Este día haré el mejor de mi vida. Este día aprovecharé los minutos hasta su máximo. Los saborearé y daré gracias. Aprovecharé todas las horas y a los minutos canjearé solamente por algo de valor".
Este pensamiento fue asimilado a otro, que procede de la tradición cristiana, cuando Jesús dice: "No os preocupeis por el día de mañana, cada dia trae su afán".
Tengo también esta otra idea, la cual es mía, hasta donde puede ser mía una idea: me doy cuenta de que yo no sé cómo se las arregla la Tierra para girar alrededor del Sol, y cómo se las arregla el mundo para organizarse cada día. Si me abandono a la corriente, la corriente me lleva.
Sin embargo, no todo el tiempo soy un pensador tan optimista, quizá mi carácter sea más bien contradictorio, con tendencia a lo sombrío.
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